Comenzaremos con este tema una vez que consigamos una buena dinámica de juego de pelotas. Que alcance una buena velocidad y lo mas importante que las suelte pronto. NUNCA ANTES!!!

A poder ser empezaremos con  un túnel de tres metros en recto, bien fijado para que no se mueva y no le coja miedo el perro. Lo llenaremos de comida para que comience  a entrar.  Aconsejo que dejemos que los ritmos los marque el perro y si hace falta comenzaremos a echar comida desde el exterior del túnel hacia adentro. Los perros con muchos miedos pueden llegar a tardar varias semanas en meterse dentro, pero no nos agobiemos, ante todo calma, lo importantes es condicionarlo de forma positiva.

En este punto explico que para los perros, nuestros  hombros forman una flecha que indica hacia donde vamos. Es importante que tengamos esto en cuanta a la hora de indicar direcciones y trazadas.

Cuando el perro comience a entrar a la orden al túnel lo enlazaremos con el ejercicio de las pelotas, jugando con nuestra situación para que  se independice de nosotros y busque el obstáculo independientemente de nuestra posición. Si en el momento de entrar en el túnel no ha soltado la pelota, marcaremos un fallo con una mar activante.